Probablemente hayas oído hablar de la gran cantidad de beneficios que puede aportarte el CBD, como por ejemplo ayudar a gestionar mejor la ansiedad o lograr establecer un ciclo de sueño-vigilia más saludable. Sin embargo, entre todos los efectos positivos que puede aportar a nuestro organismo, hoy hablaremos de la capacidad del CBD como analgésico y antiinflamatorio.
¿Por qué se producen las inflamaciones?
Las inflamaciones pueden llegar a ser muy molestas cuando las sufres, pero tienen un propósito muy claro y necesario para el cuerpo. En estas zonas se produce un aumento del flujo sanguíneo que favorece la regeneración del tejido cuando este ha sufrido algún daño. Eliminar por completo esa inflamación sería un error, puesto que retrasaría el proceso de curación. Lo ideal sería reducirla para que no fuera una molestia y dejar al cuerpo actuar frente a esta lesión. En este punto, es donde entra el CBD como analgésico y antiinflamatorio frente a opciones más tradicionales como podría ser el ibuprofeno.
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El efecto del CBD frente a inflamaciones
El CBD puede utilizarse como analgésico y antiinflamatorio debido a que actúa modulando el umbral del dolor a través del sistema endocannabinoide. Lo hace reduciendo la cantidad de moléculas inflamatorias que se dirigen a la zona afectada, mitigando así la inflamación y haciendo más llevadera una lesión. Los estudios avalan la capacidad antiinflamatoria del CBD, pudiendo usarlo a nivel tópico en forma de crema aplicándola sobre la superficie inflamada. Además, los efectos antiinflamatorios también podrán ser aprovechados dentro del organismo si se consume en forma de aceite para dolencias como el intestino irritable, la artritis o enfermedades reumáticas. En conclusión, si tu problema es una inflamación intestinal o de otro órgano, podrás usar el aceite y si tu problema es externo podrás utilizar una crema de CBD para tratarlo.
¿Por qué elegir el CBD como analgésico y antiinflamatorio?
Para responder a esta pregunta, compararemos los efectos del CBD como analgésico y antiinflamatorio con el ibuprofeno, probablemente el medicamento más usado para este fin. En el caso de este fármaco nos encontramos con ciertas ventajas, como que actúa de forma más rápida en el organismo, aliviando la dolencia más rápidamente. En este sentido, el CBD tarda algo más de tiempo en hacer efecto, aunque esto dependerá también de la dosis que se tome.
No obstante, frente a esta ventaja nos encontramos con una serie de inconvenientes a tener en cuenta. Por un lado, el Ibuprofeno tiene efectos adversos mayores que los que tiene el aceite de CBD. Este es un punto importante si pensamos en trastornos crónicos que necesitan de esta medicación por largos periodos de tiempo. En estos casos, el CBD como analgésico y antiinflamatorio se muestra como una mejor opción. Por otro lado, la tolerancia y resistencia del ibuprofeno aumentará a medida que lo consumamos, lo que es más complicado que ocurra con el CBD. Así pues, quizá en un momento puntual el ibuprofeno sea una buena opción, pero para tratamientos más largos el CBD se presenta como una alternativa más recomendable.
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